A pocas horas de realizarse en el Perú la ceremonia de Transmisión del Mando Presidencial, el Dr. Alan García Pérez asumirá la primera magistratura del país por segunda vez, consolidando de esta manera, el período democrático más largo de esa nación andina desde 1980.
El viernes 28 de julio, García Pérez, presidente también del histórico Partido Aprista Peruano fundado por Víctor Raúl Haya de la Torre, se convertirá en uno de los 15 presidentes civiles que tuvo el Perú desde la proclamación de su independencia en 1821 y el quinto peruano que gobierna por segunda vez. Algunos otros mandatarios que tuvieron esa experiencia fueron: José Pardo y Barrera (1904-1908 / 1915-1919), Augusto Bernandino Leguía (1908-1912 / 1919-1930), Manuel Prado Ugarteche (1939-1945 / 1956-1962), Fernando Belaunde Terry (1963-1968 / 1980-1985) y el propio Alan García Pérez (1985-1990 / 2006-2011). No se registran las dos reelecciones de Alberto Fujimori porque fueron originados por el autogolpe de 1992.
Gobernar un país empobrecido por deficiente gestión pública de períodos anteriores no es tarea fácil para ningún presidente. Más de la mitad de la población peruana vive en condiciones de pobreza, el 62 % de la población tiene diversos grados de desnutrición y la niñez es el grupo más afectado por diversos males ocasionados por pésimas condiciones de salubridad. En el aspecto social, el analfabetismo bordea el 18 % del total de la población, pero este porcentaje es mayor en las áreas andinas, especialmente el segmento femenino. El desempleo no ha sido reducido, mientras que el subempleo crece cada día más a expensas del narcotráfico, terrorismo y subdesarrollo social.
Si bien es cierto que desde hace 60 meses la economía entró en franco crecimiento, esta realidad no se siente en la población de escasos recursos económicos. ¿Cuál es la razón? Sencillamente, los índices económicos registran un sostenible crecimiento, pero hacia la recuperación. La economía recién está alcanzando el nivel que tuvo en los años 70 y faltan algunos meses para alcanzar el estándar de la década del 60, cuando el Perú era la tercera economía de América del Sur, después de Brasil y Argentina. Hoy, cuarenta años más tarde, la población peruana es también el doble y las necesidades también lo son. El denominado “chorreo” lo único que ha generado es que algunas empresas puedan recuperar en algo su nivel de inversión, pero eso no ha significado que se haya contratado nueva mano de obra. Las fábricas, las pocas que hay ahora, siguen elaborando su misma producción con la misma gente que tenían.
¿Y la agroindustria no ha generado nuevos empleos? En parte es cierto, pero en parte no. En la costa peruana, muchas personas que antes ganaban poco dinero en pequeños negocios, ahora laboran en el sector agroindustrial, pero siguen siendo la misma mano de obra de la zona. Además, está la presión de gente que viene de la sierra en búsqueda de nuevos horizontes. Este sector requiere de mayor inversión y promoción en los mercados foráneos para que muchos peruanos puedan tener un trabajo digno en el país que los vio nacer.
Pero no todo es negativo, recientemente se informó que las exportaciones peruanas alcanzaron la cifra récord de US$ 20 mil millones. ¡Qué bueno! Eso significa que en los últimos cinco años se crearon 1,500 empresas, desarrollado 400 productos nuevos de exportación e incursionado en 13 países nuevos. Se debe seguir ese camino.
Ese es el panorama que encuentra el presidente Alan García Pérez. Su experiencia en el mundo industrializado y la segunda oportunidad que le da el pueblo peruano, lo convierte en un presidente globalizado. Tiene muchos desafíos por superar, que no sólo debe hacerlo con los militantes del Partido Aprista Peruano, sino con el concurso de todos los peruanos.
El viernes 28 de julio, García Pérez, presidente también del histórico Partido Aprista Peruano fundado por Víctor Raúl Haya de la Torre, se convertirá en uno de los 15 presidentes civiles que tuvo el Perú desde la proclamación de su independencia en 1821 y el quinto peruano que gobierna por segunda vez. Algunos otros mandatarios que tuvieron esa experiencia fueron: José Pardo y Barrera (1904-1908 / 1915-1919), Augusto Bernandino Leguía (1908-1912 / 1919-1930), Manuel Prado Ugarteche (1939-1945 / 1956-1962), Fernando Belaunde Terry (1963-1968 / 1980-1985) y el propio Alan García Pérez (1985-1990 / 2006-2011). No se registran las dos reelecciones de Alberto Fujimori porque fueron originados por el autogolpe de 1992.
Gobernar un país empobrecido por deficiente gestión pública de períodos anteriores no es tarea fácil para ningún presidente. Más de la mitad de la población peruana vive en condiciones de pobreza, el 62 % de la población tiene diversos grados de desnutrición y la niñez es el grupo más afectado por diversos males ocasionados por pésimas condiciones de salubridad. En el aspecto social, el analfabetismo bordea el 18 % del total de la población, pero este porcentaje es mayor en las áreas andinas, especialmente el segmento femenino. El desempleo no ha sido reducido, mientras que el subempleo crece cada día más a expensas del narcotráfico, terrorismo y subdesarrollo social.
Si bien es cierto que desde hace 60 meses la economía entró en franco crecimiento, esta realidad no se siente en la población de escasos recursos económicos. ¿Cuál es la razón? Sencillamente, los índices económicos registran un sostenible crecimiento, pero hacia la recuperación. La economía recién está alcanzando el nivel que tuvo en los años 70 y faltan algunos meses para alcanzar el estándar de la década del 60, cuando el Perú era la tercera economía de América del Sur, después de Brasil y Argentina. Hoy, cuarenta años más tarde, la población peruana es también el doble y las necesidades también lo son. El denominado “chorreo” lo único que ha generado es que algunas empresas puedan recuperar en algo su nivel de inversión, pero eso no ha significado que se haya contratado nueva mano de obra. Las fábricas, las pocas que hay ahora, siguen elaborando su misma producción con la misma gente que tenían.
¿Y la agroindustria no ha generado nuevos empleos? En parte es cierto, pero en parte no. En la costa peruana, muchas personas que antes ganaban poco dinero en pequeños negocios, ahora laboran en el sector agroindustrial, pero siguen siendo la misma mano de obra de la zona. Además, está la presión de gente que viene de la sierra en búsqueda de nuevos horizontes. Este sector requiere de mayor inversión y promoción en los mercados foráneos para que muchos peruanos puedan tener un trabajo digno en el país que los vio nacer.
Pero no todo es negativo, recientemente se informó que las exportaciones peruanas alcanzaron la cifra récord de US$ 20 mil millones. ¡Qué bueno! Eso significa que en los últimos cinco años se crearon 1,500 empresas, desarrollado 400 productos nuevos de exportación e incursionado en 13 países nuevos. Se debe seguir ese camino.
Ese es el panorama que encuentra el presidente Alan García Pérez. Su experiencia en el mundo industrializado y la segunda oportunidad que le da el pueblo peruano, lo convierte en un presidente globalizado. Tiene muchos desafíos por superar, que no sólo debe hacerlo con los militantes del Partido Aprista Peruano, sino con el concurso de todos los peruanos.
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